Nota tomada de la Revista OBRAS.
El lado oscuro de las ciclopistas
La ciclopista de Ferrocarril de Cuernavaca es un ejemplo de lo que los diseñadores no deben hacer, opinan especialistas del DF.
FOTOGRAFÍA Vanessa Valle
POR Vanessa Valle
CIUDAD DE MÉXICO — La ciclopista de Ferocarril de Cuernavaca, bien se podría llamar la ciclovía del aprendizaje, porque cuando el Gobierno del Distrito Federal y activistas emprendieron el proyecto no había nadie en México que tuviera experiencia en la construcción de este tipo de infraestructura.
Un grupo de ciclistas urbanos, que después se conformó en Bicitekas, A.C. pidieron ayuda a Sustans, una organización inglesa, quien compartió sus documentos y las especificaciones para crear la primera ciclopista en la Ciudad de México.
Con una adaptación de ese modelo la ciclovía fue construida en 1997. Actualmente corre a lo largo de 60 kilómetros que atraviesan paisajes montañosos de áreas rurales y transitadas avenidas de la zona urbana. Los ciclistas que por ahí circulan pueden pedalear por Periférico, Chapultepec, por la zona de Topilejo o por el corredor biológico de Chichinautzin, pero diversos especialistas consideran que esta obra está mal diseñada y puede ser riesgosa para los ciclistas.
“La ciclopista de Ferrocarril de Cuernavaca es el ejemplo de todo lo que no se debe hacer”, sostiene Jesús Sánchez Romero, consultor en movilidad urbana del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP, por sus siglas en inglés).
El arquitecto opina que se cometieron varios errores, porque la infraestructura se diseñó como una ciclovía aislada, con una finalidad recreativa y no como una opción de transporte para mejorar la movilidad en la ciudad.
“La infraestructura no se pensó de acuerdo a las necesidades de los ciclistas, sino en un espacio donde no estorbara a los autos. Eso trajo como resultado que la ciclopista no conecte destinos. En muchos tramos que se circula en medio del Periférico los ciclistas no tienen forma de entrar o salir de la ciclovía. Entonces solamente te sirve para hacer trayectos largos y no cortos. Además, se optó por un diseño bidireccional que es peligroso y que no tiene los señalamientos de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana”.
Para Sánchez Romero, la ciclovía —en la que inicialmente el gobierno capitalino dijo se invertirían 10 millones de pesos (mdp)— no tiene ninguna prioridad y en algunos puntos se corren más riegos que circulando por la derecha de los coches.
El especialista critica que en algunos puntos la ciclopista tiene pendientes muy inclinadas que provocan que los ciclistas tengan que desmontarse para poder subirlas o bajarlas. “Los puentes tendrían que ser rediseñados”, cita.
En eso coincide Areli Carreón, presidenta del consejo de Bicitekas, A.C. organismo que ha demandado al gobierno que corrija estas pendientes y les dé mantenimiento.
Estela de la Luz Chávez, una ciclista novata que circulaba por un tramo de la ciclopista que conecta la primera con la segunda sección del Bosque de Chapultepec no pudo frenar, con la pendiente la velocidad aumentó, perdió el control y se impactó contra un coche que circulaba en la lateral del Periférico. Murió instantáneamente.
Este puente es una infraestructura peatonal de la década de los cincuenta y es claramente inadecuada para el tránsito en bicicleta. De acuerdo con manuales de construcción internacionales, la pendiente no debería superar 5% de inclinación, además de contar con una barrera física para proteger a los usuarios, explica Areli Carreón, quien participó junto con otros miembros de Bicitekas, A.C. en la colocación de una bicicleta blanca a la que llaman bicifantasma, para recordar que en ese punto murió un ciclista.
Comenta que el puente en donde ocurrió este accidente tiene una pendiente promedio de 30º y que no cuenta con barrera física protectora, pero además desemboca directamente sobre la lateral del Periférico, en donde los autos circulan a alta velocidad.
"Ninguna señal alerta sobre este peligro y era obvio que un accidente así podía ocurrir”, opina.
“Le hemos solicitado al gobierno del DF en repetidas ocasiones que corrija los defectos de la ciclopista. No hemos sido escuchados. Nos preocupa que, como resultado de la promoción del uso de la bicicleta y la popularidad que está ganando este vehículo, más ciclistas novatos puedan perecer al usar una infraestructura inadecuada”, alerta.
La activista señala que la infraestructura genera que aumente el número de ciclistas y que da a los usuarios una sensación de seguridad, pero que si está mal diseñada se convierte en un peligro. “Los ciclistas se sienten seguros y bajan la guardia”, asegura.
Para Carreón, el principal problema de la ciclopista de Ferrocarril de Cuernavaca se encuentra en el área urbana, porque en las zonas rurales los ciclistas pueden tener un agradable paseo en medio del bosque, con estaciones de servicio y gente que vigila que todo esté en orden.
Y además personalmente incluyo lo siguiente:
Hace unos meses, fui con mi hijo y mis nietos a una zona cercana a Tres Marías, y nos cruzamos con la ciclopista, y un vigilante de la zona, del tipo GuardaBosques, nos dijo que esa pista veía desde la ciclopista de Chapultepec, cosa que casi nadie sabe, o sea, que se puede viajar en bicicleta desde Chapultepec hasta Tres Marías, solo, que nos pidió que nos retiráramos pronto dado que los asaltos s familias en esa zona son muy frecuentes, ¡se imaginan!, es imposible disfrutar de esa instalación sin arriesgar la vida.
Ahi se los dejo.